Antes de empezar un tratamiento de reproducción asistida, tan importantes son los exámenes médicos del hombre como los de la mujer
El primer paso antes de iniciar un tratamiento de reproducción asistida es someterse a un estudio médico completo que determinará cuál es la técnica más adecuada en cada caso. Para obtener este diagnóstico, tanto el hombre como la mujer deberán realizar algunos exámenes médicos. ¿Cuáles son estas pruebas en el caso de los hombres?
El análisis del semen o seminograma es la primera y la más común de todas. Se trata de una sencilla prueba que determina la concentración, la movilidad y la forma de los espermatozoides en una muestra de semen.
Una prueba complementaria al seminograma es el llamado test de capacitación o REM, que consiste en separar del semen todos los fluidos y elementos que contiene para aislar los espermatozoides y dejarlos en un medio rico en sustancias nutritivas. De esta forma es posible seleccionar los espermatozoides con mejor movilidad, que se separan del resto. A partir de este recuento de espermatozoides con buena movilidad se podrá determinar cuáles de las técnicas de reproducción asistida existentes se pueden aplicar para fecundar al óvulo.
En algunas ocasiones, es necesario recurrir a otro tipo de pruebas más complejas como los cultivos de semen, que detectan posibles infecciones que afectan la calidad del esperma. Otra posibilidad son las pruebas hormonales; en estos casos, gracias a un análisis de sangre pueden identificarse anomalías en los niveles de ciertas hormonas, como, por ejemplo, la testosterona.
En algunos casos, será necesaria una exploración física. Mediante la palpación, el especialista comprueba que los testículos están completamente descendidos y que tienen un tamaño adecuado. También se asegura de que no haya anomalías en los conductos deferentes, que conectan el epidídimo con los conductos eyaculatorios, lugar donde se almacena el semen. En los casos en que un hombre no pueda obtener semen por eyaculación, se recurrirá a la biopsia testicular: con una pequeña punción se recuperan espermatozoides contenidos en los testículos para su correspondiente análisis y congelación, que permitirá su posterior utilización.
Cuanta más información, mejor
Toda la información que se facilite al médico durante la primera visita, como por ejemplo documentos de anteriores tratamientos de reproducción asistida, es siempre de gran ayuda. Si el paciente tiene alguna enfermedad, es importante que comparta los informes de su especialista con el equipo médico de la clínica. Todo ello será de gran utilidad para determinar el tratamiento.
Siempre que los médicos lo consideren conveniente se pueden solicitar pruebas adicionales, como un estudio del cariotipo, que examina las características de los cromosomas para descartar posibles alteraciones cromosómicas causantes de esterilidad o infertilidad.
Para su comodidad, nuestro equipo especializado puede realizar todas las pruebas durante su primera visita. No obstante, si lo desea, puede traer los resultados de las pruebas desde su lugar de residencia.